ARQUITECTURA: CREAM ESTUDIO ARQUITECTURA. INTERIORISMO: CLYSA DISEÑO CONTEMPORÁNEO.
Se propone una vivienda sostenible de diseño lineal minimalista y funcional, realizada con sistemas constructivos tradicionales. Cream Estudio Arquitectura tiene el objetivo de conseguir el máximo confort ambiental mediante la combinación de elementos constructivos bien diseñados.
FOTOGRAFÍAS: KRIS MOYA STUDIO.
El proyecto encaja un programa funcional familiar y se integra en el lugar. La vivienda se sitúa en el centro del Prat de Llobregat, en Barcelona, un entorno urbano cercano al Ayuntamiento y equipamientos. La vivienda consigue plasmar un proyecto familiar con privacidad, luz y confort y con una distribución ajustada a medida.
El proyecto de interiorismo se centró en la minuciosa selección de nuevos acabados y piezas exclusivas que complementan estos materiales. Colores como el negro, gris o el visón están presentes en toda la vivienda y ayudan a crear un conjunto armónico.
La vivienda se articula en torno al patio, un sistema pasivo y recurso del clima mediterráneo donde el jardín hace de filtro visual y climático. Esta idea inicial permite una terraza en la primera planta que genera frescor y da luz al interior que se abre sobre éste. La terraza es un espacio funcional y de ocio durante los meses de calor, es la habitación exterior como extensión del corazón de la casa. El patio permite dibujar un espacio para disfrutar en cualquier época del año.
El clima mediterráneo consigue que el patio sea el espacio intermedio, un filtro solar y visual bioclimático, además de una entrada de luz al volumen arquitectónico. El patio se diseña como un espacio cuadrado y gravas blancas, un ambiente sereno de calma y sencillez al mismo tiempo que vivo con vegetación.
La planta baja se diseña de manera funcional con las estancias como el recibidor, la habitación para invitados y una sala de juegos. Destaca el despacho, una pieza necesaria y esencial donde el padre de familia tiene su espacio independiente gracias a una gran corredera de cristal para trabajar con intimidad.
La primera planta se proyecta como un espacio abierto, diáfano y liviano que engloba las funciones de cocina, comedor y sala. Los diferentes espacios se articulan alrededor de la chimenea y están vinculados a la terraza como espacio exterior. La chimenea es el único elemento separador, un límite tácito de espacios donde se diseñó predominando su forma pura, a la vez que permite las visuales.
La escalera que conecta las plantas es una espina dorsal metálica con peldaños volados, un complejo elemento estructural. Los techos inclinados y altos son un elemento común en las habitaciones para agrandar el volumen espacial. Dos de las habitaciones comparten un baño, una original idea con dos accesos separados para optimizar la superficie.