PROYECTO: AINHOA IBARRECHE ARQUITECTURA.
Ainhoa Ibarreche realiza una reforma inteligente en un pequeño ático con una gran terraza de San Sebastián. Para conseguir mayor amplitud y luminosidad, la elección de los materiales y colores son determinantes, con tonos claros y neutros, para potenciar la luz.
FOTOGRAFÍAS: BIDERBOST PHOTO.
La casa A + P es el proyecto de reforma realizado por Ainhoa Ibarreche Arquitectura, de un pequeño ático de 55 m2 útiles y una terraza de 8m2 ubicado en el barrio de Gros de San Sebastián pensado para una pareja joven sin hijos.
El piso originariamente estaba dividido en varias piezas muy pequeñas distribuidas por un pasillo angosto que desaprovechaba gran superficie de la vivienda. Sin embargo, tenía gran potencial, ya que al ser un último piso desde la terraza entraba mucha luz. Por eso, los propietarios querían espacios abiertos, para optimizar la luz natural y el espacio y, por tanto, la distribución consta de tres únicos ambientes: salón-comedor-cocina, baño y dormitorio.
También, para conseguir mayor amplitud y luminosidad, la elección de los materiales y colores fue clave, con tonos claros y neutros, que potencien la luz. Se jugó con la técnica del claroscuro, teniendo la entrada de la casa menor altura y pintándose paredes y techo en color oscuro, para que, al entrar en la estancia contigua de una mayor sensación de espaciosidad y luminosidad. Además, las puertas de paso son de suelo a techo, para proporcionar una sensación de mayor altura, haciendo el espacio más grande visualmente.
El propietario, amante de la cocina, necesitaba una cocina abierta, para poder interactuar con sus invitados mientras prepara los alimentos, además de luminosa y que mire hacia el exterior. Por eso, la isla con la zona de cocinado es la protagonista de toda la estancia. Desde ella, se visualiza el salón, el comedor, la terraza y las vistas hacia el exterior, lo que hace más agradable la experiencia de cocinar y permite relacionarse con la familia y amigos. Además, la isla incluye una zona de taburetes para reunirse alrededor de ella.
Su pareja trabaja como freelance desde casa y necesitaba un espacio de trabajo amplio y luminoso, por lo que este espacio se integró en un rincón dentro del salón-comedor-cocina. De esta manera, se otorga privacidad sin necesidad de aislarse.
Otro de los elementos principales de la casa es la estructura de hormigón vista que permite adivinar la distribución original. El estudio ha querido integrar lo existente con lo nuevo para crear un conjunto que haga del espacio único y haga un guiño a su historia.
De cara al futuro, otro de los requisitos de la joven pareja, es que la casa se adapte y crezca con ellos. Por eso, el proyecto está planteado para que, de forma sencilla, levantando dos tabiques, se cree un segundo dormitorio. Por ello, las instalaciones de la casa están ya previstas para que funcionen con ambas distribuciones.