PROYECTO: NICOLA TREMACOLDI. EMPRESA CONSTRUCTORA: SIMÈTRIC GIRONA. MICROMORTERO: IDEAL WORK. CIERRES DE ALUMINIO: INSTAL·LACIONS ALUTEC. CELOSÍAS MADERA Y TARIMAS TERRAZAS: FUSTA VERDA. CERÁMICA Y SANITARIOS: BRANCÓS CERAMICS- SINCE 1949.
Los espacios interiores y el paisaje circundante se comunican armónicamente con esta villa con vistas al mar de la Costa Brava. Y fue precisamente la presencia del mar lo que llevó a desarrollar el proyecto con ese concepto hasta el extremo, transformando las tres plantas de la casa en una especie de mirador.
FOTOGRAFÍAS: JORDI MIRALLES.
El edificio tiene una estructura triangular condicionada por la forma topográfica del terreno. Uno de los objetivos del proyecto era anular esta forma geométrica en el interior, mediante una cuidada distribución de los espacios; las ventanas de la planta principal y la suite también resuelven su geometría reuniéndose siempre en ángulos de noventa grados y mirando al mar para permitir la máxima comunicación entre interior y exterior.
La estructura mixta de hormigón armado y hierro permitió una gran libertad compositiva de las plantas y el desarrollo de una estructura de tres alturas que se describe de la siguiente forma. Una vez superado el umbral de la planta baja, el visitante se proyecta en una gran superficie diáfana por donde se entra, las escaleras, la cocina, el comedor y la sala de estar están comunicando entre ellos. Subiendo al primer piso se llega a la suite, también un entorno diáfano en el que se fusionan dormitorio, baño y vestidor. En el sótano, se encuentran las habitaciones de huéspedes, lavadero, el garaje y la sala técnica, que representan un espacio más fragmentado por motivos funcionales, pero que siempre mantiene su orientación hacia el mar.
La elección de estos ambientes claros y luminosos transforma las habitaciones en un espacio atemporal, en el que la combinación de colores y materiales reproduce atmósferas orgánicas integradas con el paisaje marítimo.
Para mantener este efecto aterciopelado y atemporal, se han escogido materiales como el micromortero para el suelo, una solución decorativa de cemento capaz de crear superficies continuas en sólo tres milímetros de espesor, para cubrir los suelos. Sólo el hormigón armado de la estructura, dejado al descubierto en el techo y en la pared de la suite como manifestación de su estructura, da ese toque de ruido y brutalidad con un verdadero sabor.
El blanco roto de las paredes, el efecto rugoso del hormigón visto y la madera de la terraza se contrastaron así con el suelo de micromortero, que con su elegancia y materialidad permitió crear continuidad visual y resolver todas las dificultades estructurales. Los muebles también crean divertidos efectos de contraste al contraponer los colores vibrantes de las tapicerías con el sobrio gris de suelos y techo. La decoración se apoya en piezas de diseño contemporáneo muy sugestivas, escogidas de acuerdo con el temperamento juvenil de sus propietarios.
Las panorámicas fantásticas que se cuelan desde los grandes ventanales se incorporan al paisaje interior de la casa y se integran en la decoración. Se podría decir que los materiales de construcción en crudo sirven de marco a estas espléndidas vistas.
Los espacios diáfanos que caracterizan la planta baja son el marco perfecto para una vivienda donde todas las funciones comparten espacio. Una forma de entender la casa que permite disfrutar de circulaciones abiertas y de luz natural en todos los rincones. Cuando llega la noche, la luz proviene de puntos iluminados discretamente repartidos por todas las plantas.
