PROYECTO: AS ESTUDIO.
El conocimiento y gusto, por parte del propietario, del mobiliario histórico escandinavo de mediados del siglo pasado, fue la exigencia que marcó el origen de este proyecto de AS Estudio, con Fabián Aranguren y Carlos Sáez como interioristas autores del mismo.
FOTOGRAFÍAS: LUISMA AMBRÓS.
Todo parte de una vivienda de 80 m2, con una distribución convencional en el centro de San Sebastián. Tres habitaciones dan a la fachada principal, pasillo distribuidor y cocina, baño y dormitorio de servicio dan al patio interior. La pretensión del cliente de crear un amplio espacio tipo loft, unido a su necesidad de dejar una habitación principal y una de invitados, permite ordenar los espacios de manera muy concreta y delimitada por las instalaciones y estructura del edificio.
El equipo de interioristas comprende la importancia de dejar uno de los amplios ventanales de fachada para el dormitorio principal, el otro ventanal y el que da acceso a la terraza se reservaron para el gran espacio que suponen el salón-comedor y la cocina. De todas formas, y para mantener la idea primera de loft, se coloca parte del tabique de cabecera de la cama en vidrio, de manera que hay una continuidad visual de los tres huecos de fachada desde la zona de estar. Para mantener la intimidad de la habitación, esta mampara de vidrio se reviste con una persiana de lamas horizontales de madera que se pueden plegar en el momento deseado. Se consigue, de esta manera, un doble juego de luz y transparencia.
En la zona interior, y aprovechando la antigua ventana de la cocina, se crea un nuevo baño y una habitación de invitados con vestidor y baño incorporados. De esta manera, todas las estancias tienen ventilación natural. Se quiere destacar la estructura de columnas y vigas propia de la construcción de los años sesenta en los que se levantó el edificio. Además, al eliminar la mayoría de los tabiques, dicha estructura adquiere una presencia imponente que imprime carácter al espacio, reforzado en gran parte por las molduras añadidas y la iluminación desde el suelo, creando un efecto escenográfico muy interesante.
La entrada es directa al gran espacio que es la “zona de día” resultante de la unión de salón, cocina y comedor. Atravesando un pequeño distribuidor se accede al baño común y al dormitorio de invitados que cuenta con su propio baño. De la zona de estar se pasa al dormitorio principal. Para ampliar la sensación de unidad espacial, se coloca un armario auxiliar en la sala alineado con el del dormitorio en los mismos acabados de color y puertas de vidrio lacado.
La cocina se resuelve de manera que contribuya a la percepción de un mismo espacio amplio. Unificando materiales y acabados con el resto de la estancia. Un mostrador facilita los recorridos de usos principales además de albergar el horno multifunción bajo su encimera. En la pared frontal de la cocina se han eliminado los armarios altos para dar mayor sensación de amplitud, dejando sólo el mueble en columna que oculta el frigorífico integrado. Esta pared desnuda se reviste con el mismo porcelánico que la encimera y que es a la vez el mismo de las losas del suelo de metro por metro. Se aprovecha el volumen que soporta la campana para colocar una tira de luz indirecta que, además de iluminar, resalta la textura del acabado porcelánico.
El baño común sirve para cuadrar los diferentes ángulos que conforman la planta. Se emplazan en dicha zona todos los desencuadres de manera que queda un baño irregular pero que beneficia en la ortogonalidad del resto de la planta. Este baño tiene la antigua ventana de la cocina que da al patio, de forma que ventila naturalmente.
El dormitorio de invitados tiene el baño integrado en un cubo realzado por la línea de iluminación del techo y se repite el panel de vidrio con persiana de madera del dormitorio principal, jugando con la transparencia y la continuidad del espacio. El cabecero de cama, revestido en tarima en espiga, oculta en su parte posterior el vestidor transversal con acceso por ambos lados del cabecero.
En este proyecto, se buscaba una gran funcionalidad, pero también un fuerte carácter por lo que se selecciona un porcelánico de Inalco, con acabado abujardado para el suelo de toda la vivienda. Este material, y su acabado tipo piedra, necesitaba un contrapunto más cálido por ello se decide recubrir las paredes con un friso de madera en espiga, acabado en roble teñido. Un acabado que se utiliza en las paredes que están a contraluz en toda la fachada (comedor, salón y dormitorio principal) acentuando el efecto a contraluz y en los cabeceros de los dormitorios. El resto de las paredes se dejan en blanco creando, junto con los pilares, un juego de luces y sombras que realzan la estructura. Incluso en los baños, las paredes que no son las de las duchas se dejan en blanco. Los interiores de éstas se revisten con el mismo material del suelo.
Sabedores de la importancia de la iluminación, AS Estudio encuentra en este proyecto un equilibrio entre las piezas clásicas y la iluminación más técnica que resalte la arquitectura del espacio. Para ello, se instalan unos focos empotrados en el suelo y tiras de led para resaltar la parte estructural de manera no invasiva con las otras fuentes de luz.