El mobiliario principal de esta cocina se distribuye en L a lo largo de dos paredes: la primera se ocupa con las zonas de preparación y lavado, situadas frente a un ventanal para aprovechar la entrada de luz exterior, e incorpora dos módulos bajos de servicio, un lavavajillas integrado y un portafregadero. En la segunda pared se combinan muebles bajos cajoneros, una columna portahornos y dos armarios altos plegables con equipamiento interior adaptado a las necesidades de los usuarios. Las puertas de estos módulos se pliegan hasta su parte más alta, facilitando el acceso a los contenidos y permitiendo trabajar sin molestias, incluso cuando están abiertos. Además, en su parte inferior incorporan iluminación led para la encimera. Este proyecto, realizado por Moretti, ha sido equipado con el programa Minos y Karmel de Santos. Las imágenes son de Nacho Uribe.