PROYECTO: ESTUDIO ARQUEA.
Joseba Mitxelena, de Estudio Arquea, ha reformado este apartamento de vacaciones de 70 m² en un edificio del siglo XIX que se asoma al muelle de San Sebastián y que cuenta con amplias vistas a la Bahía de la Concha.
FOTOGRAFÍAS: LUIS M. AMBRÓS.
Espacio pulcro, fluido y volcado al paisaje portuario donostiarra a través de un amplio mirador (recuperado para el interior) provisto de carpintería de PVC. El interior está remozado enteramente mediante tabiques transdosados de pladur y falsos techos de cartón yeso que esconden la mampostería añeja.
En el salón se han subido los techos y se han dejado a la vista vigas de sustentación de acero, aprovechadas para para esconder lineales leds, y así cumplir con la altura de 2,5 m que exige la normativa vigente.
Tanto la mesa como las sillas han sido diseñadas por Enrique Kahle para Dvelas. La tumbona Cheslón, está elaborada con una vela naútica recuperada por Dvelas y diseñada por Enrique Kahle. También es el autor del taburete Ris, con bastidor de abedul fenólico y asiento confeccionado con una vela náutica recuperada, que descansa junto al sofá.
En el baño se ha dejado a la vista una de las vigas originarias de castaño, que emerge entre los falsos techos provistos, en todas las estancias, de iluminación led homogénea mediante los empotrables Rini Sneak de Weber&Ducré.
El apartamento sólo tiene dos puertas, además de la de acceso, que está laqueada en blanco y provista con la manilla Creta de Tecosur. Ambas son correderas, revestidas con el mismo roble natural laminado de Quick Step de los suelos.
Se han instalado con el sistema de suspensión Lite Glass, que monta las puertas con guías Klein de aluminio mate. Tanto el dormitorio como la cocina están parcialmente separados del salón mediante cerramientos de cristal transparente, que cuentan en su parte superior con estores plásticos enrollables que les proporcionan privacidad.