Este apartamento urbano, optimizado en cuanto a distribución y luz natural por el arquitecto David Olmos, sirve para ejemplificar los mil recursos que el profesional del diseño de interiores utiliza a la hora de aprovechar los metros cuadrados. Muebles especiales, iluminación adecuada, espacios diáfanos y una serie de trucos del oficio que permiten convertir un apartamento en un palacio.
PROYECTO: DAVID OLMOS ARQUITECTOS
FOTOGRAFÍAS: LUIS DÍAZ DÍAZ
TEXTOS: PABLO ESTELA
LOS TRUCOS MÁS CONOCIDOS
Los clásicos recursos del interiorista para ampliar los espacios visualmente siempre funcionan: color y espejos. Las paredes pintadas de blanco ganan luminosidad y amplitud. Los techos altos son un buen aliado que hay que resaltar. Los espejos multiplican los metros aunque sólo sea a nivel óptico. La iluminación nocturna ayuda a crear espacios vitales y a mejorar la atmósfera. Las luces colocadas a ras de suelo dan la sensación de que las paredes son más altas.
PRESCINDIR DE LOS TABIQUES
Es la primera medida a tomar cuando se trata de optimizar espacios con pocos metros cuadrados. Las estancias multiplican sus funciones según la hora del día o las necesidades de cada momento. Los espacios diáfanos propician el uso de todos los metros disponibles en salón, comedor o dormitorio.
ORDENAR EL RECIBIDOR
La organización en el vestíbulo es fundamental. Las estanterías permiten tener los objetos de uso cerca de la puerta, y las bandejas lanzadera clasifican las cosas de cada miembro de la familia. Colgadores largos que dan cabida a más de un artículo, estantes, muchos cestos y un asiento son imprescindibles. Se puede prescindir de este espacio pero siempre hay que colocar un elemento que proteja la privacidad.
PUERTAS CORREDERAS
Las puertas correderas son la mejor opción para cerrar determinadas estancias, ya que apenas ocupan espacio y resultan sumamente prácticas, especialmente en baños pequeños. Los modelos escamoteables en el tabique ni siquiera se ven cuando están abiertos y su instalación es relativamente sencilla.
SILLAS APILABLES
Nunca fallan cuando se trata de ahorrar espacio. Los taburetes y las sillas apilables son de los más útiles, sobre todo en los espacios pequeños. Se pueden usar como reposapiés, sillas o mesas auxiliares, y luego apartarlos en un rincón con mucha facilidad.