La importancia de escoger bien la almohada
Descansar correctamente es esencial para nuestra salud. Teniendo en cuenta esto, no es de extrañar que busquemos siempre el colchón más confortable, aquel que se adapte mejor a nuestro cuerpo y que nos permita un descanso reparador. No obstante, tampoco deberíamos descuidar la elección de la almohada; y es que este elemento es completamente clave para garantizar esas horas de sueño reparadoras. Cuando buscamos almohadas online, debemos pensar en algunos aspectos clave para que esa elección sea la correcta, pues lo cierto es que opciones en el mercado tenemos muchas, desde las almohadas de fibra hasta las almohadas de gel, látex o viscoelástica.
Diferentes tipos de almohadas
Lo primero que debemos saber es que hay una gran variedad de tipos de almohadas. Podemos encontrar, por ejemplo, las almohadas de plumas. Estas se adaptan a casi cualquier postura para dormir, pero producen bastante calor y, además, acumulan más ácaros que las de otro material.
También encontramos las almohadas de poliéster o fibra, que serían similares a las de plumas, pero menos blandas que las primeras.
Por otro lado, encontramos una amplia variedad de almohadas de gel, viscoelástica o de látex. Este tipo de almohadas se adaptan perfectamente a la forma y el peso de las cabezas y del cuello. Son materiales altamente transpirables, aunque pueden resultar más duras. Para solucionar esto, las podemos conseguir de diferentes firmezas, siendo más recomendables las de firmeza baja o intermedia.
Escoger la almohada según la forma de dormir
La postura más recomendable para dormir es boca arriba. En este caso, las almohadas que van a funcionar mejor con nuestra postura son las almohadas de firmeza y grosor medio. Además, también será interesante comprar una almohada con una altura media, la cual permitirá una alineación perfecta de nuestras cervicales y el dorsal de la columna.
En el caso de que la postura que tomes para dormir sea de lado, apoyando un hombro, necesitarás una almohada un poco más gruesa y firme. Además, será recomendable que sea alta o tenga una altura media. Esto es debido a que con esa altura conseguiremos que el cuello sea una prolongación de la dirección de nuestra columna.
Dormir boca abajo es la forma menos recomendable de descansar, no obstante, si sólo podemos conciliar así el sueño, la mejor opción es buscar una almohada blanda y fina. De esta forma la cabeza quedará alineada con nuestro cuerpo y simularemos la posición vertical.
Hay que añadir que si roncamos, siempre podemos adoptar la posición decúbito lateral para dormir. Esto minimiza los ronquidos. Ante todo, en este caso es mejor evitar la posición boca arriba, pues esto entorpece la respiración y podría obstruir en mayor grado las vías respiratorias.
Otras recomendaciones
Además de elegir la almohada según las necesidades de nuestra postura y sueño, hay que recordar que es mejor optar por almohadas individuales aunque tengamos una cama de matrimonio; y es que, como podemos entender, no todos dormimos de la misma forma.
Además, por higiene es recomendable