¿Qué hacer con una vivienda de dos metros de profundidad y quince metros de largo? La respuesta fue diseñarla al milímetro para aprovechar al máximo la iluminación natural. La casa se encuentra en un anexo de una iglesia de piedra construida en 1785, por lo que comparte estructura y materiales de construcción con ella.
PROYECTO: ZÜR STUDIO. ILUMINACIÓN: ELEKTRIKARIAK. Carpintería y COCINA: SOUMOBEL. ALBAÑILERÍA: UZTURRE EGITURAK. FONTANERÍA: URBEGI ITURGINTZA. FOTOGRAFÍAS: JORGE ALLENDE.
El proyecto de vivienda mínima se basó en el principio de sacar todo el provecho posible a las características de ésta, emergiendo a la luz los muros de carga de piedra de setenta centímetros de grosor, derribando los tabiques y techos para dejar la altura máxima posible. Se retrasaron las ventanas para aprovechar al máximo el espacio interior haciendo que los treinta y cinco m2 de la vivienda diesen como para poner un cuarto de baño de lujo y una cocina perfectamente funcional. Fue posible aumentar la amplitud del espacio gracias a la iluminación y a los tonos elegidos en la vivienda, pintura blanca en distintas texturas: pintura blanca sobre piedra, pintura blanca sobre hierro, azulejos blancos mates y brillante. El suelo laminado de madera de roble recorre toda la vivienda aportando calidez a las estancias.
La iluminación, tanto general como ambiental, se solucionó con tiras led de tonos neutros. Al principio se pensó que las luces tipo led hiciesen que la vivienda no fuese acogedora, pero al final resultó ser la mejor elección posible. Había peligro de que, al ser una vivienda de sólo dos metros de ancho y muros de piedra muy potentes, la casa pudiese resultar recargada. Por eso se decidió instalar una iluminación lo más minimalista posible solución que, por otra parte, acentúa la longitud de la vivienda remarcando el punto de fuga. La rugosidad de los muros estructurales de piedra blancos se contrarresta con el mobiliario de líneas limpias. Aprovechando que ésta se situaba en una planta bajo-cubierta, se instaló un sistema de calefacción con Pellets Y en invierno, la llama del fuego hace que la vivienda sea cálida y acogedora.